Él me llama con urgencia al baño. Pasamos, cierra la puerta. "Olé", me pide.
("qué macana se habrá mandado"... pienso).
"Decíme má qué es, porque es el mismo olor que había en el campamento y no quiero que se me vaya".
...
No crezcas nunca, Joaquín de mi alma.
lunes, agosto 22, 2011
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